En Aislamientos Diansa queremos que ahorres en los gastos del hogar y que consigas ahorrar energía, y qué mejor forma que explicándote 5 consejos que notará tu bolsillo.
Hoy en el blog de Aislamientos Diansa compartimos estos 5 consejos para que ahorres en los gastos del hogar.
!Empecemos¡
¿Sabías que según el IDAE (Instituto de DIversificación y Ahorro de Energía) el 50% del gasto del hogar se destina a calefacción y casi un 20% a la producción de a.c.s.
En este post podrás leer
¿Cuánta energía consumimos?
Antes de conocer los 5 consejos debemos saber que el consumo medio por hogar en España es de 4000 kWh anuales aproximadamente y un 18,9% a la producción de agua caliente sanitaria. Los electrodomésticos que más consumen son el frigorífico, la televisión y la lavadora puesto que están todos los días del año conectados a la corriente.
La mejor forma de ahorrar es eligiendo electrodomésticos eficientes, usar termostatos y realizar un mantenimiento adecuado del sistema de calefacción.
5 consejos de ahorro
- Usar termostatos. Regulará y controlará la temperatura de la calefacción, pues puedes programar la calefacción para que se active hora antes de llegar a casa si pasas todo el día fuera.
- Mantener la temperatura. La temperatura media de confort es de 21ºC. Según el IDAE, por cada grado aumentado de forma innecesaria incrementará el consumo energético a un 7%.
- Aislar la vivienda. Una casa bien aislada reduce entre un 25% y un 30% sus pérdidas de calor.
- Limpiar los radiadores. El sistema de calefacción por radiadores puede acumular burbujas de aire provocando así un paso de calor de mala calidad y el sistema tendrá que ejercer más potencia para poseer una temperatura adecuada. Por lo tanto, es imprescindible extraer ese aire de los radiadores una vez al año. Para identificar estas burbujas de aire tendrás que ver si el calor es uniforme en la superficie del radiador. Por su complejidad lo explicamos en otro apartado más detalladamente.
- Sustituir caldera antigua por una de condensación. La tecnología de las calderas de condensación permite un aprovechamiento de la energía, reduciendo así el consumo y aumentando la eficiencia.
El mantenimiento es clave
Revisar las instalaciones y equipos con regularidad es fundamental para optimizar su funcionamiento y ahorrar en gastos del hogar.
Cuando se avería algún equipo, inmediatamente aumenta el consumo, subiendo el gasto energético y teniendo en cuenta también que debes sumarle el coste por la reparación. Si realizamos un buen mantenimiento aumentamos la vida útil de nuestros equipos. Por eso es clave el mantenimiento de tus equipos para así ayudar a tu economía.
Purgar los radiadores
Debido a su complejidad, explicamos más detalladamente en este apartado la limpieza de los radiadores.
Como hemos mencionado los radiadores ha que purgarlos una vez al año para evitar la acumulación de aire en las tuberías. Si están en muy mal estado, se puede usar esmaltes y barnices fabricados con esta finalidad (de ferreterías y almacenes especializados) pero nunca pintarlos, puesto que las capas de pinturas pueden producir olores o reacciones desagradables a los productos químicos y dificultar la transmisión del calor, disminuyendo su eficiencia.
Es importante recordar que todos los radiadores tienen que ser independientes, es decir, que uno o varios de ellos puedan aislarse o desconectarse sin interrumpir la demás instalación. A parte de esto anteriormente expuesto, puedes utilizar los repartidores de costes o las válvulas termostáticas para sacar el máximo partido a tus radiadores.
Repartidores de costes y válvulas termostáticas
Los repartidores de costes son pequeños equipos digitales individuales situados en cada radiador. Se encarga de medir la temperatura del radiador y la temperatura ambiente. Por lo tanto, no miden el gasto energético pero ayudan a que los controlemos.
Y las válvulas termostáticas nos permiten regular el caudal de agua caliente que queremos que circule por el radiador, influyendo en la temperatura de la habitación y en el gasto de energía. En el mercado existen modelos manuales o electrónicos, algunos de los cuales incluso permite la programación.
